En julio estuvo en nuestras oficinas Bernard Ross, director de la consultora =mc, quien viajó a Argentina por un proyecto para un museo de dinosaurios. Aprovechamos para hacerle unas preguntas sobre su visión acerca del fundraising en América Latina.
Bernard ¿crees que existe un fundraising latino, que englobe a España y Latinoamérica?
No. Creo que España es España, y Latinoamérica… tampoco es una sola, sino un conjunto de países con diferentes estilos, como África tampoco es una. De hecho, si partimos de México, a medida que avanzamos hacia el Sur, las diferencias son cada vez mayores. Si uno, por alguna razón, se despertara sin saber dónde está, con solo abrir los ojos sabría si se despertó en Buenos Aires, Colombia o en DF. Física y emocionalmente son muy diferentes.
¿Y cómo ves el fundraising hoy en América Latina?
En general creo que el fundraising aquí es un trabajo muy «exciting», algo que tienen que dar a conocer en el resto del mundo. No sé si es por las circunstancias, o porque cuesta más llegar a los resultados, o quizás porque la crisis obliga a muchos a irse… no lo sé. El trabajo que hacen «en campo» creo que es muy bueno. Un dato distintivo es la noción de «solidaridad», una palabra que se escucha en toda América Latina.
Europa, por ejemplo, no se solidariza con Grecia, a pesar de saber y aceptar que está en graves problemas. No existe el sentido de «solidaridad», pero sí lo siento en México, en Bogotá y en muchos otros lugares de aquí. .
El fundraising es una manera de ayudar a las personas a dar lugar a sus impulsos filantrópicos. En Europa o Estados Unidos el concepto es «filantropía». En países con más recursos, las personas consideran que la filantropía es una consecuencia natural del bienestar. Se sienten moralmente responsables. Aquí es diferente: la solidaridad implica que aunque no sobren los recursos, hay que hacerse cargo de los problemas. Y no sé por qué es así. En parte estoy aquí para tratar de descubrir eso: qué es filantropía, qué nos vuelve más filantrópicos…
¿Cómo imaginas el futuro del fundraising?
Un tema que vengo discutiendo con un compañero de Ginebra es el tema de la territorialidad del fundraising. Marcelo Iñarra también está en esta línea (*). Sí, la noción de fundraising territorial va a desaparecer porque como estamos conectados podemos conseguir donaciones globalmente. Se irá creando un espíritu filantrópico en una nación, una cultura o una generación.
Muchas personas de mi generación sienten que tienen que devolver algo a la sociedad por lo mucho que han recibido, por ejemplo en educación y salud pagados por el Estado. La generación anterior nos dio algo y tenemos que legar algo también nosotros. Los Millennials son diferentes. Les interesa más avanzar en sus carreras, el sentido de libertad más que la filantropía. Son diferentes: ni mejores ni peores, pero ellos harán un fundraising diferente.
Habrá que esperar para ver…
(*) * Nota del Redactor: Marcelo Iñarra Iraegui , Director del Club de Fundraising, es co autor junto con Bernard Ross, Penelope Cagney y otros del libro «Global Fundraising» publicado con el apoyo de la AFP -Association for Fundraising Professionals- de los Estados Unidos de Norteamérica. En ese libro, Marcelo publicó en conjunto con Ashley Baldwin el concepto » Globarity», jugando con las palabras en ingles «Global» + «Solidarity», y dando a entender una nueva era de » Solidaridad Global » marcada por los medios digitales.