Todos sabemos que las historias resuenan más que los datos. Detrás de cada persona hay una historia y aprendimos que detrás de cada atleta olímpico, también. Sólo hay que saber encontrarla. Parafraseando a Andrew Stanton, uno de los creadores de Toy Story: “No hay nadie a quien no puedas aprender a amar una vez que hayas escuchado su historia”.
En los últimos días, conocimos a un lanzador de jabalina olímpico que aprendió a través de videos de Youtube y llegó a Río de Janeiro siendo campeón del mundo. Julius Yego, keniano, entrenó mirando tutoriales de grandes atletas en un ciber en Nairobi. Con 10 años, él mismo se fabricaba sus jabalinas con palos que recogía del suelo. En este video, podrás conocerlo brevemente:
Otro de los casos que volvió a emocionar fue el del súper atleta estadounidense, Michael Phelps. De pequeño le diagnosticaron Déficit de Atención e Hiperactividad. En su adolescencia sus brazos crecieron mucho más de lo común. Y por todo eso empezó a nadar. Así rompió muchos récords y ya lleva ganadas más de 20 medallas de oro olímpicas. Emociónate con este video:
Y de nuestra propia comunidad latina, el flamante ganador de la medalla en vela, Santiago Lange, logró el oro olímpico a los 54 años tras superar un cáncer. El año pasado la enfermedad le quitó un pulmón pero eso no le impidió competir este año nuevamente en los Juegos Olímpicos de Río.
Las ONGs tenemos, como estas, un montón de historias verdaderas para contar, para dar a conocer el trabajo y el cambio que realizamos en el mundo. Sólo hay que saber encontrarlas y contarlas de un modo que transmitan el interés y la emoción a esas personas que están dispuestas a colaborar con tu causa.
